sábado, 25 de junio de 2011

Souvenir

Souvenir


Llavero, el regalo comodín. ¿Cuántos llaveros tenemos en casa? Destinados a nunca ser usados. Yo los cuelgo de una taza, y sin moverme de la silla ahora mismo cuento 5, y de ellos 2 no los usaría NUNCA.

Recuerdo cuando era jovenzuela (más), que llevar muchos llaveros molaba (o me molaba a mí) y acababas con una pelota de recuerdos (lo positivo era que quedabas bien con todo el mundo) y lo problemático era encontrar las llaves cuando querías abrir la puerta. A medida que creces, y ves que para salir lo más cómodo es el bolso minúsculo, y que de lo poco que necesitas las llaves de casa son lo más importante, la pelota de llaveros queda atrás y escoges uno (¡o ninguno!) que te acompañará hasta que se caiga o hasta que te independices (ja!) y conmemores el hecho comprando un llavero excesivamente caro, pero extremadamente simbólico.

En fin, que me he cambiado el llavero de casa, no, no me independizo, pero quiero aprovechar la llegada a casa para recordar momentos felices :)

Often I receive keychains as a gift and I rarely use them (after all I only need two, one for the car keys (the cocktail keychain, very appropiate) and one for the home keys). When Maria and Ferran gave us a keychain as a souvenir from their wedding I decided I'll use it this time, not only it was pretty, but was quite a special ocasion and such a happy night, it deserved to be remembered as often as possible.

(So, keychain or keyring? wich one is the "good" one?)

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